10 historias más sobre gatos felices

En el 25 aniversario de FELIWAY, presentamos 25 historias felices sobre gatos y para dejar aún más claro que los gatos son una “obra maestra” de los felinos, en esta ocasión te dejamos con 10 “Happy Cat Stories” más.

1.  Gatita introvertida…

Sasha era una gata bicolor joven y nerviosa a la que llevaron a un refugio para animales. Su vida era caótica, viviendo con otros gatos mayores y más grandes. Además, por su propio bien, le realizaron una cirugía para castrarla. Tanto su estado físico como mental no eran los mejores, pero sus nuevos Cat Parents estaban decididos a darle un hogar seguro y amoroso.

Cuando fueron a por ella, les avisaban: “nunca se acabará de sentir unida a la familia”.

¡Qué equivocadas estaban esas predicciones!: con el tiempo, mucha paciencia y la ayuda de FELIWAY, Sasha ahora es parte de una familia amorosa y nada le gusta más que acurrucarse.

2. Persuadiendo a un gato

Félix no sé dejo persuadir por su humano hasta 3 semanas, 3 semanas después llenas de intentos para ganarse su confianza. Alimentarlo regularmente lo llevó a estar más cerca de ser acariciado. Esto le llevó aventurarse por la casa en busca de su comida favorita y un poco de agua y luego comenzó a acomodarse en el sofá para echarse una siesta.

Este fue el comienzo de una hermosa amistad y tras 3 años, ha desarrollado su propio carácter y tiene más confianza con otras personas y gatos. Encontró a un amigo y un hogar para siempre.

3.  El gato más bonito del vecindario

Hace 7 años Ernesto y su amigo humano se conocieron mientras él deambulaba por el vecindario y se hicieron amigos al instante. Su vínculo creció, pero como él tenía un collar, su nuevo amigo sospechó que ya tenía dueño.

A pesar de que Ernesto pasaba la mayor parte del día en su nuevo hogar, la familia sintió que debía devolverlo a su verdadero hogar por lo que su amigo decidió llevarlo al veterinario para que le revisaran el chip.

¡Y no había chip! Unos días después, lo castraron y le colocaron un chip con los detalles de su nuevo hogar. Posteriormente descubrieron que Ernesto provenía de una familia del barrio que no se preocupaba por sus gatos. Ahora es inseparable de su nueva familia humana.

4.  ¡La pequeña de la camada!

Desde el primer día, la pequeña Layla fue una gata nerviosa. Era la más pequeña de la camada y tuvo que ser llevada a su nuevo hogar antes de lo normal. Y allí se pasó dos días escondida debajo de una cama.

Pero cuando Layla se aventuró a salir, ganó confianza y si su nueva familia tenía que dejarla por un período de tiempo prolongado, se aseguraban de tener Difusores FELIWAY en todos sus lugares favoritos.

Layla se ha convertido en una anciana amigable y muy querida que sabe cómo salirse con la suya, especialmente cuando se trata de golosinas.

5.  Asustada de su propia sombra

Una gata delgada y asustada apareció en un jardín y se quedó mirando a su futura amiga humana. Como esta no sabía nada de gatos, se le aconsejó que no la alimentara o se quedaría. Pero incapaz de resistirse, su amable nueva amiga la acogió.

La gata tenía miedo de su propia sombra e incluso se asustaba si un pájaro volaba cerca. Y como no tenia chip ni encontraron a nadie que la estuviese buscando se adelantó para que se convirtiese en su nueva mejor amiga.

Cuatro años más tarde, Pixie ha engordado, tiene un hermoso pelaje brillante y le encanta jugar con sus gatitos adoptivos. Es probable que le hayan quedado traumas, ya que todavía le teme a los visitantes y nunca sale del jardín ni por la puerta principal. Pero, ¡Es genial que Pixie encontrase un hogar para siempre!

6.  ¡Rexie, el gato dinosaurio!

Rexie fue abandonado por su madre y se le podía escuchar llorando desesperadamente. Un amable extraño comenzó a alimentarlo con una jeringa durante todo el día, pero con solo 5 semanas de edad, Rexie comenzó a perder todo su pelaje.

Solo la cabeza y la cara se salvaron de la pérdida de pelo, y su pequeño cuerpo se tambaleaba como un dinosaurio mientras caminaba (de ahí su nombre). No tenía habilidades para relacionarse con otros gatos y era muy torpe.

Sin embargo, gracias a la ayuda de FELIWAY y mucho amor el pequeño Rexie prosperó de manera muy adecuada. Se ha transformado en un lindo gatito y un fiel compañero. Incluso tiene una ovejita de juguete de la que no se separa.

7.  De tiempos difíciles a formar parte de una entrañable familia

Georgie era un gato callejero que tardó meses en confiar en sus nuevos dueños tras ser rescatado. Con el tiempo, se convirtió en el mejor amigo de los gatos mayores de su nueva familia, pero lamentablemente ambos fallecieron con 6 meses de diferencia.

Georgie luchó para sobrellevar la situación y se deprimió, lo que llevó a sus padres a adoptar a Nala. Los dos ahora son inseparables y juegan y se acicalan juntos.

Durante su adopción, se convirtió en un tierno gato y su dueño esperaba regresar a casa de su turno en el hospital para recibir su dosis diaria de Georgie y Nala. ¡Después de un comienzo difícil en la vida, ahora es un gato amoroso que transmite alegría!

8.  ¡Usó una de sus siete vidas!

Lunar era un gatito cuando sus dueños lo acogieron. Un hermoso gatito blanco, vivaz y juguetón

En su segundo cumpleaños, tomó su desayuno y algunas golosinas, antes de que lo dejaran salir a jugar. Esa fue la última vez que sus dueños lo vieron en una semana. Por desgracia, Lunar había sido atropellado por un coche; pero… ¡se las arregló para volver a casa a pesar de tener la pelvis rota!

Afortunadamente, sobrevivió y por recomendación de los veterinarios no se le permitió volver a salir. Pero pese a ello llevó una buena vida.

9.  Los estragos de la pandemia

A veces nos olvidamos del confinamiento a causa del covid. Fue un período difícil tanto para las personas como para los animales y lo peor de todo es que miles de gatos fueron abandonados en las calles de todo el mundo.

Hana era uno de estos gatos: un joven macho de 18 meses rescatado de las calles durante la pandemia. Una organización benéfica local para gatos lo cuidó y lo transportó a su nuevo hogar.

Allí, encontró cariñosos padres humanos que dicen que se comportaba como cualquier adolescente humano: ¡duermiendo todo el día y organizando fiestas maratónicas por la noche! Además, es muy sumiso con su hermana gatuna de 18 años y le parpadea cortésmente, le da un par de toquecitos en la nariz y se sienta como un guardián en la puerta principal.

10.  ¡Promesa de cumpleaños!

Nero es un gato de pelo negro doméstico de unos 10 meses. Rescatado cuando era un gatito en circunstancias desafortunadas, parecía feliz y lleno de alegría en su nuevo hogar: ¡saltaba, jugaba y comía como un campeón!

Pero cuando Nero cumplió 6 meses, se despertó una mañana sin poder caminar. Sus dueños lo llevaron de urgencia al veterinario y allí le diagnosticaron una forma de polineuropatía. Esto significa que perdía la capacidad de caminar cada pocas semanas y tenía que ser cargado, alimentado a mano y llevado al baño.

Ya no tiene la capacidad de saltar o caminar normalmente, pero toda la atención adicional lo ha convertido en el gatito más cariñoso y tolerante. Sus dueños dicen que FELIWAY realmente lo ha ayudado a mantener la calma cuando pierde la capacidad de caminar dado que en esos momentos se siente confuso y estresado.

Debido a su polineuropatía, Nero tiene una vida más corta que otros gatos, por lo que el plan es malcriarlo y darle la mejor vida que un gato pueda tener. ¡Sus dueños están deseando que llegue su primer cumpleaños ahora!

Nuestros gatos realmente traen amor y consuelo a nuestros hogares, incluso cuando a veces están un poco tristes. Es posible que estos gatos no hayan sido esbozados por Leonardo da Vinci, pero esperamos que estas historias inspiradoras hayan traído un poco de luz a tu día.