7 consejos de entrenamiento de gatitos para una relación "prrrrfecta"

Los gatos son muy inteligentes, ¡pero no aprecian tanto como los perros los elogios verbales o físicos que sus dueños humanos pueden darles! Y también son generalmente más independientes, con frecuencia, están bastante contentos con su propia compañía.   

Pero eso no significa que los gatos no puedan ser entrenados - pueden serlo perfectamente, y entrenar a un gato puede ser tan importante y gratificante como entrenar a otras mascotas. 

¡Es un momento de juego y de crear un vínculo divertido y estrecho! 

Esperamos que nuestros gatos sean capaces de afrontar hechos que no necesariamente les impactarían de forma natural, como compartir su espacio con otros animales, a pesar de que son criaturas territoriales y no están acostumbrados a compartir; o alejarlos de su espacio de confort usando un transportín para hacer una visita en coche al veterinario.  

Entrenar a tu gato para que se sienta cómodo en diferentes situaciones y experiencias no solo lo ayudará a él, sino que cimentará en ambos la relación "prrrrfecta". 

Puntos clave 

Antes de embarcarse en las "sesiones de entrenamiento", recuerda que: 

• Los gatos aprenden constantemente por asociación: por ejemplo, pueden haber estado mirándote cuando estabas ocupado en la cocina y les diste un pedacito de su comida favorita, así que intentará de nuevo repetir lo que hizo y ¡zas! ¡otra golosina para sus bigotes! 

• Los gatos son naturalmente curiosos, así que aprovecha esto cuando los entrenes. 
• La edad perfecta para comenzar a entrenarlo es cuando es un gatito, pero también es perfectamente posible entrenar a un gato mayor, aunque puede llevar un poco más de tiempo. 

Beneficios de entrenar a tu gato 

Tu gato se volverá más sociable. Ayuda a tu gato a aprender sobre diferentes tipos de personas y a sentirse cómodo compartiendo su hogar con ellos. 

Aprenderán los límites. ¡Enseña a tu gatito que las manos y los pies humanos no son juguetes, y que los muebles no son para rascarse! 

Aceptarán que los humanos los manejen.  Entrenar a tu gatito para que tolere ser manipulado lo ayudará a sobrellevar la situación cuando debas bañarle, cortar sus uñas o cuando necesite ser examinado por un veterinario. 

Responderán a su nombre. Cuando tu gato responda a tu llamada podrás limitar muchos peligros o protegerlo de situaciones que sabes que le pueden generar ansiedad, como fuegos artificiales o ruidos fuertes. 

Tu vínculo se fortalecerá.   A los gatitos les encanta jugar y pasar tiempo juntos. Entrenar a través del juego es una excelente manera de vincularte con tu gatito.  

7 consejos de entrenamiento para una relación "prrrrfecta"

1. El entrenamiento basado en recompensas es el mejor camino. Averigua cuál es la recompensa favorita de tu gatito: ¿tiene una golosina favorita? ¿Tal vez prefiere un pedacito de pollo? ¿O se pirra por unas golosinas caseras para gatitos?
2. Si tu gatito es joven, extiende las sesiones de entrenamiento a lo largo del día para que no se canse. Si tienes un gato mayor, puede ser más receptivo al entrenamiento temprano durante la mañana o por la noche. 
3. Haz que las sesiones de entrenamiento sean cortas y positivas. Detenlas si observas signos negativos. 
4. No intentes obligarlos a participar en sesiones de entrenamiento; si no están interesados, inténtalo de nuevo en otra ocasión.   
5. Asegúrate de que tu gatito se sienta cómodo y relajado antes de comenzar cualquier entrenamiento. FELIWAY® Optimum puede ayudar a mantener a tu gato sereno, tranquilo y receptivo a tus indicaciones. 
6. Usa un espacio tranquilo donde tu gato pase la mayor parte de su tiempo, así tu minino no se distraerá con cosas nuevas o diferentes.   
7. Usa tus instintos inquisitivos naturales para mantener su interés. 

Ejemplos de entrenamiento de gatos

Usando el transportín para gatos.  Instintivamente, a un gato no le gusta ser acorralado o encerrado en un espacio confinado, y tampoco le gusta que lo lleven lejos del lugar donde se siente seguro, por lo que debemos hacer que el transportín para gatos sea algo "normal" para ellos.   

Vamos a aprovechar algo que si le gusta: descansar en cómodas camas, mirar desde lugares privilegiados y las cajas. 

Utiliza un trasportín que puedas desmontar, para que se acostumbre primero a dormir en la parte de abajo. Utiliza su manta o su cojín, ponlo dentro y déjalo en su zona favorita. 

Luego, deja el transportín, ya con la parte de arriba, y con la puerta abierta en un lugar tranquilo, su cojín o manta, y algún juguete o comida, que pueda tentarlos en el interior. 

 La curiosidad, inevitablemente, se apoderará de ellos y entrarán a investigar. Una vez que hayan investigado varias veces, puedes cerrar la puerta durante unos segundos, (y abrir rápidamente) luego minutos, acumulando confianza para que, llegado el momento puedas levantar el transportín y llevarlos a cualquier lugar. 

Recuerda recompensarlos en cada paso para que su asociación con el transportín sea positiva. Tras un viaje exitoso, deja el transportín a su alcance para que no se pierda la familiaridad que ha generado con él. Si muestra signos de nerviosismo, retrocede un paso e inténtalo de nuevo.  La paciencia es clave. 

Usando el arenero.  Los gatitos normalmente se familiarizan con la caja de arena cuando todavía están con su madre y hermanitos, por lo que entrenarlos para usar un arenero no debería ser muy complicado.   

• Asegúrate de que la caja sea del tamaño adecuado para tu gato. A los gatos les gusta enterrar sus heces, así que deja suficiente espacio para que puedan cavar. 

• Coloca el arenero en un lugar accesible. Puedes llevar a tu gatito allí al principio para que aprenda dónde está, y luego irá allí por su propia cuenta. 
• Recuerda que a los gatos les gusta la privacidad, por lo que una zona tranquila es ideal. Evita las grandes ventanas y las puertas con mucho movimiento, ya que en estas áreas es más probable que estén molestos.  
• Es posible que tengas que probar varios sustratos para encontrar uno con el que tu gatito esté contento. Puedes empezar probando el que usaba con su mamá. Cualquier cambio posterior debe realizarse de manera gradual. 
• Si tienes más de un gato, necesitarás más de un arenero. Te recomendamos uno para cada uno de tus gatos, y uno más ¡de emergencia! 
• No coloques la caja de arena cerca de ningún electrodoméstico ruidoso, como una lavadora.  A los gatos no les gusta que los molesten y podría disuadirlos de usar el arenero. 

• Cambia la arena regularmente: a los gatos les gusta su "lavabo" muy limpio, y si su arena no se ha renovado periódicamente, es probable que ensucien fuera de la caja. Recuerda recoger sus cacas, al menos, diariamente, y usar productos de limpieza para la caja que sean aptos para gatitos.  
• No los castigues si ocurren 'accidentes'. 
• Muy importante: Cuando empiecen a usar su arenero, recompénsalos para que se genere una asociación positiva y vuelvan a usarlo. 

Sesiones de juego.  El tiempo de juego  es una parte importante del entrenamiento, ya que no solo es muy divertido, sino que también puede ayudar a tu gato a desarrollar sus instintos naturales como cazar, saltar, esconderse y perseguir. Reserva unos momentos fijos durante tu día y mantén las sesiones interesantes cambiando los juegos para que no se aburra. Si conoces qué juguetes o juegos le gustan, puedes usar esto como recompensa en otros entrenamientos.  

Es importante recordar que, a medida que tu gato se hace mayor, es posible que no tenga la misma energía que cuando era un gatito, y puede estar más feliz acurrucándose a tu lado que persiguiendo un ratón de juguete. 

El entrenamiento también le enseña a tu gato a convertirse en un miembro querido de la familia y a aprender a vivir con los humanos en un entorno mutuamente beneficioso. Es un proceso gradual y toma tiempo que los gatitos aprendan, pero es importante mantener siempre la calma y la paciencia. ¡Seguro que tu gatito te va a sorprender con todos los trucos que puede aprender!