Sobrevivir de camino al veterinario
"¡Qué bien! ¡Hoy voy al veterinario!"... es algo que ningún gato ha dicho... nunca.
Es bastante normal. ¿Quién de nosotros disfruta yendo al médico o al dentista? Y aún es peor para tu pequeña bola de pelo; porque no puedes explicarle que es por su propio bien.
Pero no temas, vamos a ayudarte desde aquí. Continúa leyendo para que la próxima visita al veterinario sea lo más tranquila posible para tu querido gatito.
Gatito frente a Veterinario
De verdad, tu amigo felino odia no tener el control. Poner a tu amigo peludo en un transportín, llevarlo en el coche para finalmente ir a un entorno completamente nuevo, como una clínica veterinaria, es algo sobre lo que tu gato no tiene ni pizca de control, así que puede ser estresante.
Un minino poco contento
Hay varias señales que puedes indicarte que tu peludito se siente infeliz: maúlla en exceso, se esconde, araña o se hace pis fuera.
En el lenguaje de los gatos, te está diciendo: "Oye, sé que me estás llevando a algún lado y la idea no me entusiasma."
Recuerda: para tu gato, la clínica veterinaria es un lugar que asocia a cosas que no le gustan. Hay olores extraños, ruidos fuertes y, por si eso no fuera suficiente, otros animales que, para tu gato, son bastante terroríficos. Ponte en el lugar de tu gato. Probablemente harías lo mismo que él y te esconderías donde fuera hasta que la idea de un viaje al veterinario sea solo un recuerdo lejano.
Mantén al gato en calma y adelante
Una buena idea es acostumbrar a tu minino a su transportín unos días antes de la visita. No querrás que tu gato asocie el transportín con un viaje al veterinario. Para reducir el estrés, te recomendamos que pulverices en el transportín FELIWAY® Classic Spray durante los días anteriores al día D, de "Decisivo", que es la cita al veterinario.
Al liberar los mensajes tranquilizadores naturales para felinos, FELIWAY® Classic Spray proporciona calma y bienestar al viajar o desplazarse al veterinario.
FELIWAY® Classic Spray: consejos de uso
El día de la visita al veterinario, pulveriza en el transportín con el spray antes de salir de casa. Pulveriza cada rincón una vez, y el suelo y el techo, un par de veces. Si vais a viajar durante un largo periodo de tiempo, recomendamos volver a aplicar FELIWAY® Classic Spray cada cuatro o cinco horas.
Espera 15 minutos entre la aplicación y la presentación del trasportín a tu gato.
En el caso de que tu pobre minino tenga que pasar la noche en la clínica o quedarse durante más tiempo es buena idea conectar el difusor FELIWAY® Help! en casa para que pueda relajarse al volver al hogar. FELIWAY® Help! proporciona a los gatos un mensaje de felicidad y es ideal para situaciones de estrés de ocasional, con una duración de 7 días.
Ahí lo tenemos. A nadie le gusta ir al médico, pero, con suerte, cuando vuelvas a casa te encontrarás mejor y tus seres queridos te colmarán de cariño y comprensión. Tú deberías hacer lo mismo por tu gato.