Los sentidos y nuestros gatos: El olfato

¿Alguna vez te has preguntado cómo experimenta tu mascota el mundo que la rodea? En la sociedad actual, nuestras mascotas son miembros de la familia; los cuidamos inmensamente. Para comprender sus necesidades, es útil explorar cómo se comunican con nosotros y cómo perciben el mundo que los rodea. Este blog es el segundo de una serie de cinco partes que profundizan en cómo los gatos usan cada uno de sus cinco sentidos.

La nariz lo sabe

Se suele pensar que los animales tienen un gran sentido del olfato y están más en sintonía con los olores que los humanos, pero ¿cuánto mejores son detectando olores? Sigue leyendo para descubrir lo poderoso que es realmente el sentido del olfato de nuestro gato.

Experiencia olfativa del gato

En el último artículo, hablamos de lo importante que es la visión para los gatos en comparación con sus otros sentidos. En general, los gatos dependen mucho más de su sentido de la visión que del olfato.

Si bien la capacidad de olfato de un gato es mucho mejor que la de un humano, no es tan refinada como lo es en los perros.

Este hecho está relacionado con la cantidad de receptores olfativos que están presentes a lo largo de su epitelio olfativo. Los humanos tenemos 6 millones de estos receptores, mientras que los gatos tienen 80 millones y los perros alrededor de 300 millones. El mayor número de estos receptores proporciona una mejor capacidad para discernir e interpretar diferentes olores.

Los aromas (u odorantes) suelen ser compuestos orgánicos solubles en lípidos. La cavidad nasal está revestida por un tejido llamado epitelio olfatorio. Este tejido utiliza una capa de mucosa para atrapar los olores, donde entran en contacto con células receptoras especiales que transmiten la información al cerebro.

Los centros olfativos del cerebro también transmiten información a la amígdala, el centro emocional. Este intercambio de información hace que el olor modifique la emoción y la memoria.

¿Alguna vez has olido galletas recién horneadas y has pensado en tu abuela? ¿Sentiste un perfume en el aire y recordaste un enamoramiento adolescente? Los olores también afectan a las emociones de los animales, incluido el miedo y la amistad.

El uso más común del olfato en los gatos es detectar marcas de olor. Esto es especialmente importante porque los gatos son territoriales y pueden optar por evitar a otros individuos, por lo que utilizan marcas olfativas para transmitir información. Una de las formas más conocidas de distribuir el olor es rociando con orina.

El marcaje con orina, es una de las quejas sobre comportamiento más frecuentes en la consulta del veterinario. En la naturaleza, el gato marca con orina los elementos a lo largo del camino más transitado para delimitar el territorio. Los gatos machos pueden rociar hasta 12 veces por hora, mientras que las hembras normalmente solo lo hacen una vez por hora.

Debido a que la información de estas señales se deteriora después de 24 horas, es necesario actualizarlas periódicamente. Puedes saber cuándo un gato está rociando orina cuando retrocede hacia una superficie y mueve la punta de la cola; a veces incluso pisa el suelo con las patas al mismo tiempo.

Hay que diferenciar este rociado o marcaje con orina de la orina que eliminan al hacer pis.

Cuando hacen pis, la postura es más relajada, casi sentados. Cuando marcan con orina en spray, suelen hacerlo de espaldas a una superficie vertical y “pulverizan” una cantidad de orina pequeña.

La ansiedad es otra causa del comportamiento de rociado o marcaje con orina. Es posible que los gatos que comparten espacio dentro de una casa no hayan elegido ser compañeros de habitación y que el espacio no proporcione suficiente distancia para su gusto. La tensión aumenta y, a veces, las interacciones se vuelven antagónicas. El resultado es ansiedad y puede manifestarse como rociado de orina (o marcaje con orina en spray).

Otras formas en que los gatos marcan el olor son usando sus glándulas interdigitales (rascándose), frotándose la cara (banderines) o usando secreciones anales.

Rascado

El arañado desempeña varias funciones en el bienestar y la comunicación de los gatos. Es un comportamiento normal, cuya finalidad es acondicionar las garras y permitir el estiramiento de las extremidades anteriores y la columna vertebral, pero ¿qué se comunica con esta acción?

Cuando los gatos arañan una superficie, dejan marcas de garras para comunicarse visualmente, pero también dejan depósitos de sus glándulas odoríferas interdigitales como mensajes olfativos. Aunque se trata de un comportamiento normal en la naturaleza, hasta el 50% de los gatos muestran un comportamiento indeseado de arañado en casa y es un factor frecuente de problemas en la convivencia.

Feromonas

Las feromonas son sustancias químicas que se liberan como parte de diversas secreciones para enviar un mensaje químico a otro individuo de la misma especie. Estos mensajes químicos son detectados por un conjunto muy especial de células dentro del órgano vomeronasal (una estructura que no está presente en los humanos).

Estos mensajes no siguen el mismo camino que los olores. En cambio, se comunican más directamente con el centro emocional del cerebro porque las señales suelen transmitir información, alertar sobre peligros o identificar la disponibilidad reproductiva. El resultado es la preparación de una respuesta fisiológica y/o conductual.

Para detectarlas y analizar las feromonas, los gatos hacen un gesto especial denominado “flehmen”. Es un gesto en el que mantienen la boca ligeramente abierta y con la lengua, atraen las moléculas que están en el marcaje hacia el conducto incisivo y luego hasta el órgano vomeronasal. El comportamiento de flehmen o "boquiabierto" se observa con mayor frecuencia cuando un gato huele la orina de un gato extraño.

Los productos de feromonas (como FELIWAY Optimum) pueden ayudar al gato cuando aparecen conductas inapropiadas debidas al estrés. Hay evidencia científica que respalda el uso de Feliway en gatos para ayudar a disminuir la ansiedad y la pulverización de orina en hogares con un solo gato o con varios gatos.

Hierba gatera

Algunas plantas también pueden provocar ciertos comportamientos en nuestras mascotas. La más famosa es la hierba gatera, un miembro de la familia de la menta, pero ¿qué tiene la hierba gatera que la hace tan embriagadora?

La sustancia química activa nepetalactona se dirige a receptores que son similares a los receptores de una droga similar a los opioides, y puede hacer que los gatos se sientan eufóricos. Eso podría explicar por qué los gatos huelen, ruedan, babean y se frotan la cara con la hierba gatera. Es importante señalar que la hierba gatera no es una sustancia adictiva.

Curiosamente, sólo alrededor del 66% de los gatos domésticos responden a la hierba gatera. Otras especies de felinos como leones, jaguares, leopardos y linces también pueden reaccionar. El presunto propósito de la sustancia química o alomona en la naturaleza es disuadir a los insectos que podrían ingerir la planta. Casualmente, los gatos que han sido frotados con aceites de la planta de hierba gatera tienen menos probabilidades de atraer mosquitos que los gatos no tratados. ¡Seguramente les resultará útil cuando acechan a sus presas!

Conclusión

El mundo del olfato es fascinante y ayuda a nuestros gatos a interactuar con el mundo que les rodea, encontrar comida, intercambiar información y disfrutar de la vida. Si bien el sentido del olfato puede no ser tan importante para los gatos como el sentido de la visión, aprenden y comunican una inmensa cantidad de información a través de la nariz.

Únete a nosotros para la próxima vez que exploremos otro de los cinco sentidos que ayudan a los gatos a percibir el mundo que los rodea.